Hoy me enteré del fallecimiento de Ian y de Bobby, y si, van cumpliendo años y es como ese tío tuyo que ya es mayor pero que lo conoces desde que eras un niño, y parece que van a estar ahí siempre, que todos se van yendo pero ellos no..., y es un palo, ver como los grandes se van, gente que te han hecho disfrutar en un concierto o pasar un rato maravilloso oyendo esa música maravillosa en tu casa, en sus discos. Y se me hace raro, es ley de vida, pero uno nunca termina de acostumbrarse, seguro que Keith echará de menos ver aparecer al gigante tejano soplando el saxo y a McLagan al piano, quien sabe si hubiese podido estar en el final del tour. En fin...