Tengo algunas cosas por agregar.
Primero que nada mil gracias a Ignacio porque he tenido mucho trabajo últimamente y no es muy frecuente en Uruguay que se agoten entradas (más allá que sean pocas entradas) dos semanas antes del recital, cuando las fui a sacar no había, me quería matar, le avisé a Ignacio por las dudas y también le comenté que, sacando a relucir mis instintos más bajos y con un comportamiento totalmente carroñero, ja,ja, me tiraba hasta Punta del Este sin entrada haber si ligaba algo, en el peor de los casos lo escuchaba de afuera.
Al mediodía, me despierta mi celular y es Nacho diciéndome que la entrada del Doc era mía (Gracias Nacho.... y gracias Doc, lo suyo ya es un apostolado) Gran forma de comenzar el día. ¡¡Espectacular!!
Debo agregar que tuve más suerte con la gente que me rodeaba, pues eran todos fans de Bob Dylan, sólo vi a lo lejos a una familia de 4 personas salir a mitad del concierto (si tenía una magnum 44 les juro que les disparaba y seguro no le erraba, ja,ja).
Realmente fue lo que uno se puede esperar en un recital de Dylan, una lección de rockabilly, folk, country, rock, para mi gusto fue brillante, y no soy fan de Dylan.
Para mi los puntos altos fueron "Girl Of The North Country ", donde suena por primera vez su armónica y fue una ovación, "Highway 61 Revisited" (me mató) y "Like a Rolling Stone", donde sentí que sobrevoló el fantasma de Brian, sea o no cierto que hubo algo de inspiración en Brian cuando Bob la escribió, por supuesto como dice Ignacio fue cantada, Juancho incluído, siguiendo la genial versión que hicieron nuestras adoradas majestades.
Es la segunda vez de Dylan en Uruguay, la primera fue en agosto de 1991, donde salió a caminar por la calle en la fría noche montevideana a las 8 de la noche, acompañado por su hija y su guardaespaladas por los alrededores del lugar donde tocó, mientras Eduardo Darnauchans (cantante uruguayo que actuó de telonero) iniciaba su set. ¡Qué grande todos estábamos adentro y Dylan afuera!
Considero que ésta vez fue mucho mejor el recital que en el 91 esencialmente por dos motivos:
1) en el 91 tocó en el cilindro municipal (nuestro principal reducto basquetbolístico, alrededor de 12.000 personas) lugar de una pésima acústica, fue una bola de sonido donde no se identificaba nada;
2) ahora Dylan tiene 66 años, es mucho mayor el mito, cuanto más añejo es, más fuerte es verlo.
Saludos banqueteros