El fin de un ícono musical
¿Se separan los Rolling Stones?Keith Richards, guitarrista del célebre grupo de rock inglés, lanzará una autobiografía en la que revelará también aspectos secretos de la desenfrenada vida sexual de su compañero Mick Jagger, quien está furioso con la obra.
Por ello, la prensa británica no descarta el fin de la mítica banda.
La autobiografía de Keith Richards, titulada Life, sale en octubre, pero desde ya tabloides ingleses, como News of the World y Daily Mail, pronostican que sus indiscreciones marcarían el comienzo del fin de la agrupación número uno del rock. Todo debido a que Mick Jagger no ha disimulado su furia porque su amigo de la infancia, y con quien fundó los Stones en 1962 junto a otros integrantes, develará los más truculentos aspectos de su vida de mujeriego, su gusto insaciable por las drogas y las maldades que le ha soportado.
La crudeza de las historias como que es tal, que los managers del grupo le pidieron a Keith que les bajara el tono, al menos en cuanto a Jagger, para no atizar el fuego de una relación de amor/odio que nació a comienzos de los años 50, en una escuela primaria en Dartford, Inglaterra. Por ese entonces, junto a la camaradería, surgió también la antipatía, en especial por parte de Richards, quien cuenta que Mick le pareció “una mala hierba” desde que lo vio pavoneándose con su profesor de Ciencias con el cuento de que algún día haría una bomba atómica.
Seis décadas después, según el biógrafo de ambos, Chris Salewicz, estas memorias de Richards son el desahogo de años y años de rabia contra Jagger, a quien ha calificado públicamente de banal. En efecto, no le perdona al cantante su estrellato en el jet-set y su amaneramiento en su vestimenta y cuando están en el escenario, al punto de que lo apodó la ‘Reina Madre’. A propósito de realeza, cuenta Salewicz, una de las peleas más rudas entre ellos se dio cuando Jagger aceptó su investidura de caballero por parte de la reina Isabel II. Richards consideró que ello era ajeno a la rebeldía de los Stones y casi no le vuelve a hablar. Además, le reprocha ser un maniático del control.
Para Salewicz, Jagger y Richards son como marido y mujer o como dos hermanos entrañables que han hecho de sus peleas un estilo de vida. Han tenido épocas en que no se dirigen la palabra y, actualmente, cada cual tiene su manager, viajan separados en sus giras y no socializan por fuera de sus ensayos y presentaciones.
Keith no resiste la tentación de atormentar a Jagger con sus maliciosos comentarios, y lo logra. Dicen fuentes cercanas a los músicos, consultadas por el Daily Mail, que cada vez que el guitarrista da una entrevista, él pregunta: “¿Y qué dijo de mí?”. Estos informantes también recuerdan que si algo irritó a Jagger, fue que su rival dijera que él tiene un pene pequeño y que eso es lo que lo pone tan irritable.
Empero, esta eterna trifulca podría tener raíces más profundas. Richards ve con muy malos ojos la azarosa vida amorosa de Mick, de la cual son testimonio sus siete hijos con cuatro mujeres distintas, además de sus cientos de amoríos, que incluyen a Angelina Jolie y Carla Bruni, entre otras célebres bellezas. Aunque es el más contestatario del grupo, Richards es muy conservador frente al amor: deplora los romances de una noche, sólo por sexo, y es hombre de una sola mujer. De hecho, únicamente ha tenido dos relaciones en su vida, con Anita Pallenberg, con quien vivió entre 1967 y 1979; y Patti Hansen, su esposa desde 1983. Con Pallenberg, Jagger se atrevió a traicionarlo, en el rodaje de la cinta Performance. Cuando Richards se enteró, sospechó que Marlon, uno de los hijos que tuvo con ella, era fruto de ese affaire.
¿Perdonó Richards a su amigo? Para muchos, su frecuente hostilidad hacia él indicaría que no. Según Salewicz, revivir esos días será su revancha en la autobiografía, sazonada con otros sustanciosos relatos sobre cómo Mick arruinó su matrimonio con Jerry Hall y su crueldad con otra de sus mujeres, Marianne Faithfull.
Hay quienes sugieren que lo que Richards le envidia a Jagger es su eterna energía y encanto, algo que él no conoce a causa de su caótico estilo, muy del estereotipo del rockero. También le incomoda su fino sentido para los negocios, sin el cual los Rolling no hubieran durado tantos años y que lo ha hecho el más rico del grupo. Keith, por ejemplo, amenaza con pegarle cada vez que hace discos o conciertos como solista. Jagger, por su parte, hizo lo propio cuando el guitarrista posó para un aviso de Louis Vuitton.
A la final, sosegados los ánimos, así sea por poco tiempo, ambos siempre terminan reconociendo que sus peleas son cosa de familia. De acuerdo con Marianne Faithfull, Richards es la única amistad que Mick siente que vale la pena. Y según múltiples anécdotas, no es raro verlos compartir las cobijas para calentarse en una noche fría o estar en contacto cuando uno de los dos está enfermo. ¿Prevalecerán esos sentimientos una vez Mick lea la nueva autobiografía de este amigo que es su enemigo favorito? Sólo en octubre se sabrá la respuesta.
Fuente:
http://www.jetset.com.co/noticias-de-boca-en-boca-chismes-noticias-de-farandula/separan-rolling-stones/2444.aspxPor qué digo estrategia de venta.. a mi parecer el que keith hablase de Mick en su libro es algo totalmente esperado, y por como se sabe que es su relación con él no podriamos esperar que le tire flores... pero no creo que estas diferencia entre ambos se deba a celos de parte de Keith por la personalidad de Mick, sino a años de convivencia.
Puedo llegar a enterder que quizas a Keith se le haya ido un poquito la mano o haya sido crudo en sus relatos, pero que podemos pedirle? que frene sus sentimientos y comente acorde al gusto de Mick.. no lo creo.
Este es mi primer post, espero que les haya gustado!
Saludos para todos!
Naty