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« on: Septiembre 27, 2021, 02:02:05 am »
Son eternos, los Stones…
Con un show muy emotivo, los Rolling Stones regresaron al ruedo para celebrar la antesala de sus sesenta años de carrera. El inicio del “No Filter Tour 2021” tuvo al ausente Charlie Watts como su principal protagonista.
Por Agustín Soria.
Otra vez, el streaming nos permitió seguir de cerca el inicio del tour de los Rolling Stones en Estados Unidos. Ni el PCR negativo, ni el cambio de divisas fueron excusas para no ver y ni escuchar gratis a la banda más longeva de la escena musical. Ladies and gentleman, enteros o a pedazos, Los Rolling Stones.
El show comenzó con un compilado de imágenes de Charlie Watts que rememoraron la ausencia del extinto baterista. Como grandes luchadores de miles de batallas “Street Fighting Man” fue la primera página que presentaron después de dos años de ausencia forzada en la ruta. El grupo no detuvo su motor y arremetieron con dos viejos clásicos inoxidables “It’s Only Rock and Roll” y “Tumbling Dice” con un Jagger muy activo como lo vimos en sus redes sociales hace unos días atrás. En “19th Nervous Breakdown”, Mick y Keith compartieron voces y volamos inmediatamente a los años de Brian Jones, otro ausente con aviso en esta nueva etapa de la banda. Pero antes sonó otra gema sesentista, “Under my Thumb”, una canción controversial que supo poner a los Stones en la primera plana de los medios por su contenido machista.
Desde la gira Bridges To Babylon ’97-‘98, los Stones permiten que el público participe en el armado del set list, en esta oportunidad, “Wild Horses” fue la seleccionada entre las baladas ofrecidas. El set lento cerró con “You Can’t Always Get What You Want” que sonó desprolija y austera con la grabación del coro orquestal.
La pandemia discontinuó los shows en vivo pero no el proceso de creatividad del grupo por eso “Living in a Ghost Town”, cuyo video mostraba una Londres vacía, se presentó por primera vez en el inicio del tour 2021. Con “Start Me Up” y “Honky Tonk Women” finalizaron el primer set cargado de recuerdos y ausencias. ¿O acaso no vale la pena nombrar a Bill Wyman y Mick Taylor después de tantos años de carrera?
Keith Richards se apropió del mic para versionar “Happy” y Slipping Away” dos viejos conocidos que siempre cobraron protagonismo a lo largo de las giras. Fue uno de los pocos momentos que el hombre del riff avanzó en el escenario ya que se mostró más retraído que en otras oportunidades.
A esta altura del show, Steve Jordan merece un párrafo aparte. Fue como una bocanada de aire fresca, un salvoconducto que tuvo la oportunidad de acompañar cuando era necesario y volcar su experiencia desde la banqueta con algunos pequeños arreglos y licencias. Su aparición en las pantallas agigantó su figura y, ante cada intervención, el baterista no defraudó.
En “Miss You”, Mick Jagger mostró toda su destreza: bailó al son de sus hombros, se desplazó en el escenario de punta a punta y hasta se animó a la pasarela que conectaba con un pequeño escenario en el centro del estadio. Mientras las piruetas del cantante cobraban protagonismo, Darryl Jones, el bajista que acompaña a los Stones desde el Voodoo Lounge Tour, metió un solo con su instrumento que se robó todos los aplausos; Ron Wood, de sobresaliente papel, agitó al público y los saxofonistas, Karl Denson y Tim Ries, cruzaron bronces generando un clima de riña de gallos.
Como es costumbre el guardián del “sonido stone”, Chuck Leavell, marcó el preludio de “Midnight Rambler” que no perdió su esencia a pesar de que Keith cambió viola mientras Mick jugaba con los presentes que colmaron The Dome at America’s Center. La canción tomó ritmo después del puente musical y arremetió como un tren sin freno. Los “dados” ya estaban tirados y los Stones no defraudaban.
Para el final, llegaron los bises “Paint it, Black” más acelerada que las versiones que veníamos escuchando, “Sympathy for the Devil” con un juego de luces imponentes creando un clima intimidante, “Jumping Jack Flash” con las guitarras de Keith y Ronnie batiéndose a duelo, y “Gimme Shelter” con la voz de Sasha Allen como principal protagonista.
Precedido por “Satisfaction”, lo último que se escuchó en la noche, los fuegos artificiales iluminaron el escenario en el saludo final y la figura de Charlie Watts volvió a ser protagonista, mientras Jagger, Richards y Wood le rendían pleitesía al público y a su antiguo compañero de ruta.
pd: Thanks Guy's Rodrigo Saraibe, Jim Seubert, Christy Losaw, Es solo Rolling Stones y Franco Fernandez