Perdón que reviva este hilo pero quería compartir esto con ustedes. Tuve el enorme privilegio de ver a Ronnie y Mick el día 9 de noviembre en el Cutting Room.
Ya tenía planeadas mis vacaciones en NYC, las cuales adelanté una semana para poder sacarme la espina de ver en vivo a The Black Crowes. Cuando surge el rumor que Ronnie y Mick iban a tocar en noviembre creo que el corazón empezó a latirme a mil. Cruzando los dedos porque ya tenía el pasaje y el hotel esperé esos eternos días hasta que se confirmó y al ver las fechas les puedo asegurar que no podía creerlo, son esas cosas del destino que uno nunca termina de entender. A partir de ese momento estuve entrando en la pagina donde vendían las entradas a cada rato (la venta fue bastante desprolija, si mal no recuerdo no se sabía cuando se ponían en venta) y una madrugada antes de irme a dormir chequeo la pagina llevándome la sorpresa que ya estaban disponibles. No me alcanzaban los dedos para meter los números de la tarjeta de crédito de la desesperación porque sabía que era un show en un lugar chico y si las entradas de los Stones vuelan no quería imaginarme la de un show como este. Soy consciente de que tuve muchísima suerte porque se agotaron en muy poco tiempo y al día siguiente ya estaba lleno de comentarios de Yanquees recalientes porque no pudieron comprarla. Conseguí las 2 entradas que necesitaba, saque la de 100 dólares, que era la mejor ubicación en unas mesitas, similar a las de La Trastienda y comenzó la cuenta regresiva.
El 9 de noviembre llego al Cutting Room como 3 horas antes para retirar las entradas y hacer guardia con el fin de ser uno de los primeros en entrar. Me explican que en los dos shows anteriores hubo problemas por entradas truchas por lo que la entrada seria con lista y una pulserita, me lamente porque quería la entrada de recuerdo.
Una hora antes ya había muchísima gente en la puerta y comienzan los movimientos de la gente de seguridad, estacionan dos camionetas, venían uno en cada una. Imposible acercarse a ellos.
Una vez dentro del lugar fue cuestión de esperar a unos 3 o 4 metros del escenario sentados comiendo una picadita y tomando una cervecita. Nos tocó compartir la mesa con un hombre y una rubia muy bonita, la cual nos hizo estallar de risa cuando le dijimos que éramos de Argentina y nos respondió "aaa cerca de Italia", claramente su fuerte era la belleza jaja.
El show fue impecable en todo sentido, todos temas de Blues, el sonido tremendo, ellos más vigentes que nunca, Ronnie contando anécdotas entre tema y tema que me hacían recordar el comienzo del video Anybody Seen My Baby, la verdad que no encuentro forma de explicar lo que vivi esa noche.
En fin, no podía haberme salido tan redondo, bueno en realidad si... solo si hubiesen tocado los Stones, pero no me puedo quejar.
Espero no haberlos aburrido. Subo algunas fotos que saque, no te dejaban filmar ni sacar fotos con flash.
Un abrazo Stone.
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