Coincido con Chorch en que se impuso la practicidad, pero nada más.
La diferencia en calidad de sonido se da hasta en archivos comprimidos. Y llámenme vetusto, pero parte del encanto de los formatos físicos, particularmente cintas y vinilos, es su resguardo y cuidado. Vamos, se trata de un objeto coleccionable, con numerosos componentes más allá del sonido.
Me atrevo a decir que los morros de ahora lo saben. Parte del revival de los vinilos se provocó por ellos, que buscan ediciones antiguas y provocan reediciones muy interesantes.
Lo de la grabación de blue & lonesome lo pongo en entredicho, pues el estudio de Mark Knopfler guarda todo tipo de cachivaches para grabación, algunos descontinuados y antiquísimos:
http://www.soundonsound.com/music-business/british-grove-studios-londonDe modo que ahí, uno puede elegir entre grabar con lo más moderno y digital, o irse por una grabación a la antigua. Blue & lonesome es un disco de blues grabado en tres días, así que...