Ayer volvieron los Who a Madrid cumpliendo la promesa que hizo Pete Townsend al finalizar su anterior concierto, hace 10 meses. Y de nuevo estuvieron muy, muy bien, aunque reconozco que me gustó más el de hace 10 meses, supongo que por ser la primera vez, porque tocaron menos temas nuevos y porque este era el segundo concierto de la gira y se nota que están menos rodados (empezaron en Lisboa antes de ayer).
Pero aún así, me gustó mucho. Además el montaje de video esta vez estuvo de lujo. El sonido dio un pequeño susto cuando, finalizando Who are you, tras un guitarrazo se paró en seco. Estuvimos unos 10 minutos sin sonido. Luego continuó el concierto sin problemas.
En cuanto al ambiente un poco agobiante, la pista estaba repleta y hacía bastante calor, las gradas estaban más despejadas. Dicen que había unas 10.000 personas.
Arrancaron con Can't Explain donde pasaron imágenes de los 60, incluyendo alguna que otra foto de Jimi Hendrix y Brian Jones. Continuaron con fuerza con The Seeker, pero a continuación metieron dos temas nuevos, lo cual enfrió un poco el arranque. Cuando se volvieron a meter al público en el bolsillo con Who are you, sobrevino el corte de sonido cuando ya acababan el tema.
El rearranque fue suave pero muy coreado, Behind blue eyes, para pasar a lo que, en mi opinión, fue lo mejor del concierto: Quadrophenia. Tocaron seguidas The Real Me y 5:15, esta última con imágenes de la película correspondientes a la batalla campal en Brighton pasadas a blanco y negro. Por supuesto no faltaron los gritos de “We are the mods” en todo momento. Luego más adelante, Pete Townsend tocó sólo a la guitarra acústica Drowned.
Por supuesto no faltaron Baba O'Riley, imprescindible catarsis colectiva, y Won't get fooled again, potentísima, así como otros clásicos como Substitute, My generation o The kids are alright, así como una sorprendente Eminence Front, por lo visto muy poco conocida por el público.
Como hacen habitualmente, para los bises reservaron un set de Tommy: Pinball Wizard y encadenadas 1921+Amazing Journey+Sparks+See me, Feel me.
Lo que menos me gustó fue que tocaron demasiadas canciones del disco nuevo (como 5), desconocidas para mí (y creo que para la inmensa mayoría del público), a pesar de que algunas sonaban realmente bien.
En definitiva, buen sabor de boca para la espera hasta la llegada de nuestros Stones.
Saludos.
P.D: Odio CSI. Qué asco de conversión masiva debido a una puta serie de TV. Lo único que saben decir los periodicos de hoy es que cuando tocaron las canciones de CSI el público se volvió loco o que las canciones de CSI fueron las más coreadas. Como si Won’t get fooled again no fuera un clásico de su repertorio desde el mismo año 1971. Y qué decir de Baba O’Riley, auténtico himno convertido en música de fondo de cortinilla telesiva.
