Todo lo que tocan, vale oro. Así pasa con las grandes estrellas. Keith Richards tiene ese peso, como guitarrista de los Rolling Stones y como personalidad del mundo del espectáculo. Supo tener, entre sus pertenencias, una Ferrari Dino 246 GT. La compró cero kilómetro en 1972, en California, para llevarla a su casa de Chelsea, Inglaterra, en 1975 y finalmente venderla en 1986.
Ahora, en manos de un coleccionista japonés, saldrá a subasta en la casa británica Coys con los mismos 40.000 kilómetros que le hizo Richards. La casa de subastas no dio a conocer la cotización de base con la que iniciará el remate.
Cada criatura de la casa de Maranello tiene su historia. Dino fue el nombre que utilizó la marca para los deportivos de tracción trasera fabricados entre 1968 y 1976, que además portaban motores de menos de 12 cilindros.
Diseñado por Pininfarina, la Ferrari Dino 246 GT llevaba esa nomenclatura por el cubicaje del motor y el número de cilindros, en consecuencia, la 246 era por el motor 2.4 litros y los 6 cilindros. Y el nombre, el apodo con que llamaban al hijo más chico de Enzo Ferrari: Alfredo "Dino" Ferrari.
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