mmm ... este es mi review del show ... lo hice horas después de leer algunas críticas lamentables de medios periodísticos. Los que hablaban bien, ni siquiera comentaron acerca del problema del sonido. Los que hablaron mal, exageraron muchísimo.
En el show, hubo gente que dice que no escuchó nada y otra que escuchó perfecto. Muy raro.
Acá va ...
Guns N´ Roses hizo vibrar a la jungla más peligrosa
Guns N´ Roses rockeó en Buenos Aires después de 17 años en el Estadio de Vélez. En un show que duró casi tres horas, la banda, pese a algunos problemas de sonido con el micrófono de Axl Rose, le entregó a los argentinos un show adrenalínico de principio a fin.
El barrio de Liniers desde muy temprano ya estaba movilizado por la llegada de la mítica banda estadounidense que, a pesar de contar con sólo un miembro de la formación original, sigue atrayendo multitudes. Esto demuestra una vez más, que siempre una voz y el carisma de un frontman de excelencia, y mucho más en el caso de Axl Rose, genera muchísimo más que todo el resto de una banda. Es simple, el sonido musical se puede reemplazar. Pero, no la voz humana. Lógicamente, a pesar de llamar Guns N´ Roses a esta formación, uno sabe que está viendo y siendo parte de un show de Axl Rose. La esencia gunner de Slash, Duff, Izzy/Gilby, Steven y Matt no iba a estar presente en el José Amalfitani.
Una vez dentro del estadio se podía ver un escenario que hacía imaginar la espectacularidad que tendría el show horas después. Una pantalla gigante en el centro, otras cuatro rectangulares a los costados de la misma y otras dos sobre las pasarelas laterales. Los fans ingresaban tranquilos y se ubicaban lo más adelante posible. A las 18:30 Massacre se subió a las tablas. La banda de Wallas sonó satisfactoriamente y brindó un set de poco más de media hora que fue un poco accidentado por los intolerables de siempre que arrojaban botellas al escenario, en el que repasaron algunos clásicos y algunas canciones de su último y exitoso disco, ¨ El Mamut ¨. Un rato después llegó el turno de La Mancha de Rolando que, en contraposición a lo que sucedió con Massacre, tuvo una buena recepción. Fría al comienzo pero que luego generó algunos saltos por parte del público. La banda agradeció el respeto y le dejó el escenario a Sebastian Bach. El ex Skid Row, se demoró un poco pero se hizo presente. Con un poco de demagogia (a la segunda canción ya decía que era el mejor show de su vida), canciones rockeras al mango y una voz que parecía endemoniada, se ganó al público que no paró de poguear en casi todo el set. Muchos ¨ Ti amo Argentina ¨ y arengas a Guns N´ Roses desde el principio hasta llegar al final de su set en el que, repasó canciones de ¨Angel Down ¨ , su último disco, un nuevo tema que será parte de su próxima producción y algunos clásicos de Skid Row. Las bandas soportes hicieron amenizar la espera para el plato fuerte.
A las 23, casi con dos horas de atraso, la intro del show generó un griterío infernal en todo el estadio. No era para menos, para los argentinos poder ver a William Axl Rose después de tanto tiempo significaba muchísimo. La música y especialmente el rock, son el arte con la capacidad de generar muchísima más pasión que cualquier otra cosa. En una charla entre fans ubicados a 30 metros y sobre la valla lateral que dividía el campo en dos, se comentaba el por qué de la ubicación, que por cierto era bastante privilegiada. ¨ Estuve en coma 7 días, casi me pierdo el show y por eso no puedo ir más adelante ¨, comentaba uno. Sí, al flaco no le importaba lo que pudo haber pasado con su vida. Lo único que tenía en la cabeza era poder ver a su banda predilecta. Estas cosas genera la música.
Bueno, al fin comenzó el show. Un escenario con la exageración al punto justo que debe tener una puesta rockera. Buenas luces, pantallas gigantes (las que reproducían imágenes de los músicos no eran de la mejor calidad), pirotecnia y una gran banda con un líder mítico como lo es ese tipo de 48 años que parece de mucho menos. ¿ Gordo ? No parecía tanto. Los años no pasan solos y … ¿ a alguien le puede generar una crítica más que un comentario ? Allá esos. ¨Chinese democracy¨ y ¨Welcome to the jungle ¨ dieron comienzo a la fiesta y se complementaron a la perfección para generar un gran descontrol en el campo. Siguieron ¨It´s so easy¨ y ¨Mr. Brownstone¨ y ya se podían oír las quejas de la gente en ciertos sectores, especialmente en la parte más próxima al escenario, por el sonido de la voz de Axl. El inconveniente continuó durante los primeros 50 minutos del show. Una pena. Durante ese transcurso pasó de todo. Axl paró el show en tres oportunidades (con traductor de por medio que nunca le comunicó a Rose el ¨no se escucha¨ que gritaban algunos) ya que la gente tiraba algunos objetos, algunos para llamar la atención ya que no se escuchaba como debía ser la voz del cantante, y otros, sólo por la estupidez de no aceptar a los nuevos músicos o por molestar e intentar molestar. El público argentino puede ser el mejor del mundo, como lo dicen muchos de los artistas que vienen a nuestro país. Pero también tiene algunas cualidades que lo puede hacer convertirse en el peor, y como pasó en este show, puede poner en jaque la continuidad del mismo. Por suerte, Axl estaba con bastante paciencia y soportó el incómodo momento. En todo ese transcurso pasaron varias canciones. Las de ¨ Chinese Democracy¨ , la última producción de la banda, como la genial ¨Sorry¨, ¨Better¨ o ¨If the world¨, para nada emocionaron al público, que se mantuvo un tanto distante y no demostró mucho entusiasmo.
A partir de ¨ Street of dreams¨ la voz de Rose podía escucharse mejor. El colorado siempre estuvo muy activo. Corrió, hizo sus característicos movimientos y cantó de gran manera. Si bien se podía notar en la voz un poco del desgaste que lógicamente producen la cantidad de shows que viene realizando, su performance fue superlativa. El que tuvo la oportunidad de verlo de cerca podía notar que nunca desafinó y se esforzaba muchísimo para alcanzar los niveles que él únicamente puede.
Un tema aparte fue el poco feedback que hubo entre parte del público y los nuevos músicos que tiene Guns N´ Roses. Que hacen lo que tienen que hacer, y de la mejor manera. Uno cerraba los ojos y escuchaba a Guns N´ Roses. Carismáticos. Virtuosos. Y con mucha actitud. Ningunos empleados del rock como dijeron por ahí.
El show se completó con algunos clásicos de la vieja época. El momento más emotivo fue ¨November Rain¨, que tuvo una intro con ¨Another brick in the wall¨ de Pink Floyd. También hubo covers como ¨Knockin´ on heaven´s doors¨ de Bob Dylan y una potente ¨Whole Lotta Rossie¨ de ACDC en la que Rose estaba ¨prendido fuego¨ , además de otras nuevas canciones del último disco. Antes de ¨Patience¨, Ron Thal, uno de los nuevos guitarristas, sorprendió con una melodía de ¨Por una cabeza¨. El final como de costumbre fue con ¨Paradise city¨, en el que desató un desborde descomunal en el campo y finalizó con toda la pirotecnia, papeles voladores, serpentinas, etc. Fin del show. Aplausos, saludo de toda la banda y al final palabras de agradecimiento de Rose por la noche que se vivió.
En definitiva, la actuación de Guns N´ Roses en Argentina luego de los 17 años que pasaron de aquel show en River en Julio de 1993, pudo haber sido perfecta, pero no lo fue. ¿ Por qué ? Lamentablemente por un error humano o técnico. Sería exagerado pasar a describir de que fue un show casi perfecto a que fue un ¨karaoke¨, como hizo algún medio o por lo que se escuchó comentar luego de finalizada la actuación en distintos sectores. Axl Rose y compañía están demostrando en lo que va del ¨Chinese Democracy World Tour¨ que se encuentran en el mejor momento de esta nueva era de Guns N´ Roses desde aquel regreso en Las Vegas en el 2001, y Argentina fue testigo de eso.
Nota: La nota la hizo alguien que vio casi todo el show de 5 a 10 metros de distancia del escenario. De cualquier manera en cuanto al inconveniente con el sonido, se tuvo en cuenta a la hora de redactar los distintos comentarios y videos vistos del show del 22 de Marzo en Vélez.