La última de los Rolling Stones: su concierto en un hipódromo de Belgrado obligará a dopar a unos 300 caballos
23/04/2007
El caso no es sencillo. Los organizadores del concierto que se celebrará el próximo 14 de julio en el hipódromo de Belgrado han decidido que la única forma de que los caballos “no se alteren, ni se estresen”, por el previsible elevado volumen del concierto de los Rolling Stones, será doparlos. Las asociaciones de ecologistas han puesto el grito en el cielo y piden que el concierto se lleva a cabo en otro lugar.
El problema es que se espera la asistencia de unos 100.000 fans de la banda liderada por Mick Jagger. Los precedentes de esta actuación están al nivel de la actual polémica: el concierto se espera aún con más pasión precisamente porque esta misma actuación ya había sido suspendida en dos ocasiones, en 2003 con la muerte por asesinato del primer ministro Zoran Djindjic y en 2006 por el famoso y misterioso accidente estival de Keith Richards. La espectación, por tanto, es mucho mayor de lo normal.
La ORCA, la principal asociación de defensa de animales de Serbia, ha comenzado una intensa campaña de oposición a esta actuación, pidiendo que se ofrezca el concierto de los Rolling Stones en cualquier recinto al aire libre, en cualquier otro punto de la ciudad porque, argumentan, “el hipódromo es para los caballos”. Creen que conseguirán hacer cambiar de idea a los organizadores, pero ya han decidido que si su reivindicación no tiene éxito, hablarán con los mismísimos Rolling Stones, a quienes confían en conmover fácilmente al explicarles la situación.
