Los stones debieron hacer lo mismo con shine a light.. en vez de filmar con esos ricachones y acomodados..
dejo una nota que salió en clarin
http://www.clarin.com/espectaculos/musica/Angus-Young-Buenos-Aires-apasionado_0_484751617.htmlDesde Londres, a un día de la premiere de AC/DC - Live at River Plate , el DVD que registra el paso del Black Ice World Tour de la banda australiana por Buenos Aires, en diciembre de 2009, Angus Young saluda con una cortesía y una calma que poco tiene que ver con la furia que el hombrecito vestido de colegial despliega en escena.
“Tengo mucha expectativa por ver la reacción de la gente. Las imágenes son fantásticas”, dice el menor de los hermanos Young, que en 1973 creó una máquina de rock que parece tener cuerda para rato.
Hicieron una gira que pasó por 28 países. ¿Por qué eligieron la Argentina para hacer el DVD? Fue una decisión que tomamos antes de empezar el tour, luego de que nos lo sugiriera la gente de la compañía discográfica, con la referencia que tenían de cómo nos recibió el público la primera vez que tocamos allí.
¿Qué había tenido de especial aquella primera vez? Por lo general, siempre es excitante cuando vas a un lugar que no conocés. Porque nunca sabés realmente lo que puede pasar con la gente hasta el momento en el que salís al escenario y te enfrentas con el público. Recién entonces te das cuenta que también en ese lugar del mundo hay fans tuyos, y eso tiene un sabor especial.
En el DVD, agunos de esos fans, ponen a AC/DC en el lugar de una religión, y dicen que después de verlos, sólo queda morir. ¿Qué sensación te produce ese tipo de devoción? Eso es un complemento para la banda, que tomamos como una demostración de cuánto aprecian lo que hacemos. Y está muy bueno que nos pongan en un nivel tan alto de consideración. El público en Buenos Aires es muy apasionado. A lo largo de tantos años de giras, hemos estado en algunas ciudades con cierta magia, y sin duda alguna, Buenos Aires está entre ellas.
¿Cuál es la diferencia más importante entre este registro en vivo y otros que la banda hizo en el pasado? La mayor diferencia está, fundamentalmente, en la aplicación de nuevas tecnologías. Cuando hacíamos nuestros primeros videos en vivo, había camarógrafos trabajando sobre el escenario, y eso distrae bastante. Sobre todo cuando estás tocando para un montón de gente. Ahora, en cambio, hay posibilidad de hacer muchas más cosas, sin intervenir el escenario.
Aún así, cuándo están grabando un DVD, ¿hay alguna diferencia en el comportamiento de la banda? No. Cuando estamos tocando no pensamos en otra cosa que en tocar. A lo largo del tiempo siempre aclaramos, con quien vaya a dirigir un video nuestro, que somos una banda, y que vamos a hacer el show como siempre”. No hemos sido una banda que se haya dedicado a posar para las cámaras, sino que siempre tocamos para el público que está ahí, frente a nosotros. Y tratamos de que nada se interponga entre ellos y nuestra música.
Hay quienes aseguran que cuando una banda de rock crece como lo hizo AC/DC, todo pasa a ser un negocio; lo cual, por otra parte, no estaría mal. Pero, ¿qué pasa con el placer de tocar? ¿Seguís disfrutando de las giras y los conciertos como en los comienzos del grupo? Sí. Yo siempre disfruto de viajar, de tocar. Es mi vida. Es algo que, afortunadamente hago desde que soy muy joven, y es lo que mejor sé hacer. Además, para mí, cada vez que salgo al escenario es un desafío. Siempre creí que cuando estás sobre el escenario tenés que hacer lo mejor para dar un buen espectáculo. Siempre fue así. Y me encanta seguir en la ruta, tocando, y componiendo. A lo largo de los años aprendí de qué se trata AC/DC, cuál es el sonido que tiene que tener, y todo el tiempo pongo el foco en eso.
¿Pensás en qué espera el público de ustedes, al preparar temas nuevos? Sí. Eso sí. Trato de pensar que le gustaría a la gente. Y voy guiando mi creatividad en esa dirección.
Imagino que a lo largo de los casi 30 años de la banda, el clima de las giras deben haber ido cambiando.
Sí, claro. Yo trato de aprovechar el tiempo de la mejor manera. Lo cierto es que el día siguiente a un concierto, generalmente uno tiene la necesidad de dormir hasta tarde, para recuperarse del desgaste. Después, a mí me gusta salir a caminar, a disfrutar de la libertad de moverme por la ciudad, ir a algún café. También es común que pase bastante tiempo en la habitación del hotel que me toque, tocando la guitarra, buscando nuevas ideas.
¿Contrasta mucho esta actualidad con las épocas más lejanas? En verdad, hay muchas cosas que ya dejamos atrás. Recuerdo más de una ocasión en la que de un momento para otro, de estar recostado y tranquilo aparecía con un montón de gente arriba mío. Pero, así y todo, yo nunca fui un tipo que buscara ponerse loco. Normalmente fui y soy una persona muy tranquila.
Sin embargo, la banda atravesó momentos duros. No hablo sólo de la muerte de Bon Scott, sino también de las adicciones de tu hermano Malcom y Phil Rudd al alcohol y a las drogas. ¿Cómo te las arreglaste para seguir compartiendo la música, la banda y la vida con ellos, en esos momentos? Ante todo, cuando alguien cercano a uno está pasando por algún problema, uno debe tratar de ayudarlo. Fue muy duro, porque la banda es como nuestra familia. Pero nosotros tratamos de ayudarlos, y tuvimos la suerte de que, con el correr del tiempo, ellos mismos entendieron que necesitaban ayuda.
En el tema “It’s A Long Way To the Top” hablás de lo difícil que es llegar a la cima. ¿Cuánto más cuesta permanecer allí durante tantos años? En realidad, nosotros nunca apuntamos a llegar a la cima de ningún lugar, ranking, ni nada por el estilo. Lo único que nos propusimos, desde un principio fue hacer lo nuestro de la mejor manera posible. Pero nunca nos dijimos ‘ey, vamos a ser los número uno’. Queríamos ser una buena banda. Eso era todo. Y funcionó.
De hecho, en sus recitales hay mucha gente muy joven. ¿Por qué creés que prefieren seguirlos a ustedes en lugar de ir detrás de algún grupo formado por músicos de su misma edad? No lo sé. Creo que en eso somos muy afortunados. Cuando nosotros empezamos, sentimos que habíamos establecido una conexión muy fuerte con la gente que nos escuchaba. Por suerte, a medida que íbamos haciendo álbumes, y el tiempo pasaba, fuimos viendo que se iban acercando nuevos públicos. Y que esa misma conexión que teníamos con nuestros fans del principio, que aún perdura, también la lográbamos con los más jóvenes.
Mañana presentan el DVD. ¿Qué es lo que sigue? Por ahora, estoy ocupado escribiendo nuevas canciones con mi hermano Malcom. Una vez que los dos comencemos a sentir que tenemos unas cuantas buenas canciones como para llevarlas al grupo, nos volveremos a meter en el estudio a grabar. Y como cada vez que grabamos, salimos de gira, ese es el paso siguiente. Que espero que sea pronto.
